El poder del bilingüismo: impulsa las aptitudes profesionales de tu equipo y la competitividad de tu empresa

Beat the Zoom Fatigue

Fomentar las aptitudes profesionales a través del aprendizaje de idiomas no solo se traduce en una mejora de la salud mental de nuestros equipos, pero también una mayor competitividad en las empresas.

Existen muchos estudios que analizan los beneficios de la formación en idiomas de cara a ampliar nuestro horizonte profesional. Aprender una segunda lengua sin duda mejora estas expectativas. Sin embargo, hay muchos otros factores positivos igual de relevantes en el plano personal como es tener una mejor salud mental.

De hecho, múltiples estudios como el desarrollado en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona han demostrado que cuando aprendemos un idioma diferente al materno se producen alteraciones en nuestra materia gris. Albert Costa, investigador de esta materia, asegura que “el bilingüismo esculpe el cerebro”, y que la densidad neuronal se incrementa en determinadas zonas, al igual que el deportista que desarrolla sus músculos para competir.

Fomentar que los miembros de nuestra organización potencien todas estas capacidades y además que gocen de una buena salud mental es sin duda positivo per se, ya que dispondremos de personas capaces de dar lo mejor de sí mismas. Pero, además, existen datos que avalan que invertir en el aprendizaje de idiomas también es altamente beneficioso para las organizaciones.

Los beneficios de la formación en idiomas para impulsar las aptitudes profesionales

¿Qué cualidades podemos potenciar invirtiendo en la formación lingüística de nuestro personal?

1. Capacidad de aprendizaje

Los niños que crecen en hogares bilingües tienen mayor comprensión sobre otros idiomas, incluso aunque no los hayan escuchado antes. La capacidad de discriminación de los sonidos y fonemas hará que aprendamos más rápido un nuevo lenguaje.

Cuando aprendemos idiomas solo aprendemos más, sino que aprendemos mejor. Practicar este tipo de gimnasia mental es imprescindible para adquirir conocimientos de una forma más eficiente en cualquier otra materia, y también en términos de motivación y superación constante.

2. Atención y memoria

Habituarse al cambio de un idioma a otro influye directamente sobre la capacidad de concentración. Nos permite tener un mayor control sobre la atención a la hora de hacer tareas sin distraernos, porque fomenta la habilidad de gestionar varias fuentes de información a la vez y mantener el foco en ellas. También nos proporciona mayor velocidad en el cálculo mental, para relacionar conceptos o a la hora de interactuar en el ámbito social. Esto es lo que se llama la memoria del trabajo, o sea, “la memoria RAM del cerebro” que se encarga de almacenar temporalmente la información que tenemos que procesar. Esto es esencial en el ámbito laboral.

Además, una investigación de la Universidad de Granada o otra de la Universidad de York en Canadá también inciden en la importancia que tiene aprender idiomas en edades tempranas, porque los niños que crecen en ambientes bilingües también tienen una memoria del trabajo más amplia, y en continuar con este hábito en edades adultas ya que ayudaría a retrasar la aparición de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

3. Capacidad de adaptación

Esta agilidad para hablar y alternar idiomas tiene obviamente un impacto directo en la capacidad para cambiar de una tarea a otra más rápidamente: fomenta la flexibilidad cognitiva y la facilidad de adaptarnos a circunstancias inesperadas.

También el control cognitivo es más alto en personas bilingües. De esta forma, conocer dos o más idiomas a la vez en situaciones donde debemos discernir en qué lengua nos comunicamos también hará que tengamos mayor control en las situaciones en las que hay que valorar la solución u opción más adecuada.

4. Empatía y pensamiento crítico

Todos sabemos que aprender abre la mente. ¡Y en este caso no iba a ser distinto! Los idiomas son un reflejo de la cultura de un país y de sus gentes. A parte de facilitarnos la vida a la hora de viajar, aprender idiomas también nos permite hacer un recorrido mucho más íntimo por las tradiciones y particularidades de las distintas partes del mundo. No todas las palabras significan lo mismo en todos los idiomas, o incluso hay palabras que no existen bajo el mismo concepto. Por eso aprender idiomas puede cambiar nuestra visión del entorno.

Saber ponerse en la piel del otro, seguir su línea de pensamiento y ser empático con su realidad, hará que nosotros mismos reflexiones sobre cómo nos expresamos, si lo hacemos correctamente o si podemos mejorar: fomenta el pensamiento crítico.

5. Capacidad de comunicación

Igualmente, prestar atención a la forma en la que los demás se expresan y cómo lo hacemos nosotros aumenta nuestra atención sobre las normas del lenguaje y la estructura de nuestras oraciones. Tomamos conciencia de nuestro idioma materno mejorando su uso.

Aprender a entonar en un nuevo idioma también mejora nuestra capacidad de comunicación y de transmitir a nivel verbal y no verbal.

Goodbye to Zoom Fatigue

Los beneficios de la formación en idiomas para la competitividad de las empresas

El informe “Efectos en la economía europea por falta de capacidades lingüísticas” publicado por la Comisión Europea demuestra una relación entre los idiomas y el éxito de los negocios. Este tipo de organizaciones que apuestan por la comunicación multilingüe tienen un enfoque estratégico que les permite aumentar de forma exponencial hasta un 40% sus exportaciones en comparación con empresas que no adoptan esas estrategias lingüísticas.

Para lograr estos resultados deberemos poseer una estrategia clara en idiomas apostando por la formación en competencias lingüísticas, ya que, entre otras cosas, el conocimiento de idiomas en la empresa:

  • Fomenta las relaciones internacionales
  • Suma valor al negocio
  • Beneficia la interacción con posibles nuevos clientes
  • Mejora la calidad de la negociación
  • En definitiva, aumenta la competitividad de la empresa

¿Quieres ver nuestra última infografía donde analizamos la conexión entre la salud cerebral y la salud de las empresas? ¡Descárgala aquí!